Las varices son venas excesivamente dilatadas y tortuosas que dificultan, en mayor o menor medida, la circulación de retorno de la sangre al corazón. No son, por tanto, un problema meramente estético, sino de salud.
«Existen distintos tratamientos médicos para las varices, desde la fisioterapia o los eficaces vendajes compresivos, hasta métodos quirúrgicos más o menos invasivos», nos dicen desde la clínica especializada en varices Varicenter.com. En cualquier caso, siempre e el médico especialista quien debe determinar cuál es el más aconsejable teniendo en cuenta las circunstancias de cada persona, así como el tipo de variz y su nivel de afectación.
En ocasiones, las varices requieren cirugía y son muchas las dudas que surgen sobre el postoperatorio, sobre cuándo podré hacer vida normal o incorporarme al trabajo o sobre cuándo podré hacer deporte después de una operación de varices. En este sentido, hay que recordar que son varias las técnicas quirúrgicas que pueden llevarse a cabo y que poder retomar la actividad deportiva en un tiempo más o menos corto, va a depender de las características de cada paciente y, por supuesto, del tipo de intervención a la que se haya sometido.
¿Cuál es el tiempo de recuperación de una intervención de varices?
Por suerte, las actuales e innovadoras técnicas quirúrgicas para tratar las varices son cada vez menos agresivas, algo que permite acortar el tiempo de recuperación después de una operación de este tipo. Ese tiempo no se puede determinar de manera exacta, porque varía según el tipo de intervención.
«Antes de optar por una cirugía concreta, el médico especialista realizará un estudio clínico completo del paciente, que incluirá una ecografía Doppler en la que poder apreciar la ubicación y las características concretas de la variz que necesita ser operada», nos explican desde Varicenter. Según las conclusiones obtenidas, el cirujano vascular podrá determinar la técnica más apropiada en cada caso. Una flebectomía ambulatoria, que permita extraer el tramo varicoso, un tratamiento ablativo mediante láser endovenoso, una sesión de radiofrecuencia o un tratamiento de escleroterapia con microespuma son algunas de las intervenciones más habituales, cada una con un tiempo determinado de recuperación.
Dependiendo del tipo de cirugía practicada, el posoperatorio incluirá una serie de medidas para facilitar la vuelta a la vida cotidiana con garantías. En la mayoría de los casos, durante los primeros días o semanas, será necesario el uso de una malla elástica de efecto compresivo en la zona intervenida. También es habitual que sean necesarias revisiones para comprobar la correcta evolución tras la intervención o la práctica de pequeñas curas o retirada de puntos de sutura. Generalmente, se recomienda un tiempo mínimo de reposo evitando la exposición directa al sol durante los primeros días, así como realizar algo de ejercicio suave (caminar) en cuanto resulte posible.
Solo el cirujano vascular podrá ofrecer información exacta sobre el tiempo estimado de recuperación tras la intervención de varices, ya que, éste puede oscilar entre unos pocos días y más de un mes., todo sin olvidar que determinadas técnicas permiten la incorporación a la vida cotidiana prácticamente de manera inmediata.
¿Cómo influye el tratamiento en el tiempo de recuperación?
Son las características de cada paciente (edad, sexo, patologías previas existentes) y el estado de la vena varicosa las dos variables que el médico tendrá en cuenta a la hora de determinar la técnica quirúrgica idónea en cada caso, de la que dependerá el tiempo de recuperación tras la operación.
Dependiendo de la anomalía que presente la vena, su nivel de inflamación y el estado de las válvulas internas que permiten la circulación de retorno, las varices se clasifican en distintos grados, que van desde el grado I, las más superficiales y apenas perceptibles conocidas como arañas vasculares, hasta las de grado IV, las más agresivas, que suelen ir asociadas a síntomas como hinchazón, sensación de hormigueo y pesadez en las piernas o incluso dolor (fuente: Varicenter). Especialmente estas últimas suponen un serio problema de salud y deben intervenirse para evitar la insuficiencia venosa crónica.
Hasta hace unos años, las varices se eliminaban, casi en su totalidad, mediante la técnica quirúrgica de fleboextracción (stripping). Realizando dos pequeñas incisiones en la vena safena, una a la altura de la ingle y otra en el tobillo, el cirujano podía extraer en su totalidad la vena varicosa. Esta cirugía se sigue empleando en los casos más severos de varices y requiere un tiempo medio de hospitalización de 24 horas. Además, tras la intervención es necesario llevar vendaje compresivo al menos una semana, oscilando el tiempo recuperación total entre 8 y 15 días.
Otros tratamientos como la flebectomía o extracción parcial de la variz o el uso del láser o la radiofrecuencia permiten acortar el tiempo de recuperación limitándolo a 2 – 3 días. En la actualidad, los avances médicos han dado lugar a un nuevo tipo de intervención para tratar las varices que ha hecho posible que el paciente salga de la consulta andando por su propio pie permitiendo la incorporación a las actividades cotidianas prácticamente de manera inmediata.
Se trata de la escleroterapia o tratamiento de las varices con microespuma una técnica novedosa que consiste en inyectar en la vena afectada una sustancia (polidocanol) con textura de espuma que desplaza la sangre y actúa de manera selectiva en la pared interna de la vena que presenta la variz. El contacto directo de esta solución con el vaso afectado hace que este quede ‘sellado’ y pueda ser reabsorbido por el propio organismo una vez que la deformación de la vena ha desaparecido.
La escleroterapia no requiere hospitalización, ni anestesia y una vez tratadas, las venas abultadas dejan de ser visibles de manera progresiva en 2 – 4 semanas. La recuperación es casi inmediata y, salvo que el especialista indique lo contrario, es posible retomar la práctica deportiva a las pocas horas tras la intervención.